Un grupo de estudiantes acudió a la sede de la embajada de Brasil para respaldar a los enfermeros en huelga de hambre. Marco Aurelio Quiñones, en nombre de los jóvenes, que no podían permanecer en silencio ante esta protesta y que nadie hace una huelga de hambre o de sangre por gusto.
Quiñones pidió a Dios, antes de Semana Santa, que conmueva el corazón al Presidente Chávez. En su opinión, la ministra Eugenia Sader ha tenido voluntad para resolver el problema, pero quien decide la firma del acuerdo con los enfermeros es el Jefe de Estado.
El joven exhortó al Presidente a no preocuparse tanto por quienes dejan de comer en Bolivia o Argentina y consideró que el Primer Mandatario ha debido tocar este problema en su discurso del pasado miércoles.
Como es posible que se crea aun en que hay una sola persona en el Pais que milite en el partido de gobierno que no tenga una gringola, solo ven y piensan lo que el gran jefe quiera, son personas que no tienen iniciativa estan anulados, nuestros enfermeros merecen mas que nadie un salario digno trabajan 24 horas los 365 dias del año y tienen un sueldo mísero igual que los médicos, por eso la salud no existe hace 12 años que se abandonó a su suerte o mejor dicho se le cedió a los cub.... que ninguno sabe nada de medicina esto es un caos y por un grupo de focas que solo estan por un sueldo estamos perdiendo el pais
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